En nuestra anterior
entrada nos hacíamos eco de la llegada a la librería Anatma de Sevilla del
libro “Dios” de Emilio Carrillo. Un libro muy esperado por todas las
dimensiones espirituales encarnadas en seres humanos que queremos a Emilio y
tenemos en él a un referente de la nueva Humanidad. En este post queremos
referirnos al acto de presentación del libro que tuvo lugar en Sevilla el
pasado 20 de septiembre y congregó a más de quinientas personas que llenaron a
rebosar en el salón de actos del Colegio Santa Ana.
Para mí fue una
tarde-noche mágica. El mero hecho de colaborar con mi amigo José María en las
tareas de grabación y edición en video de las charlas de Emilio en Sevilla se
ha convertido en una pequeña muestra de nuestros dones y talentos a juzgar por
lo mucho que disfrutamos los dos compartiendo la experiencia y la alegría de
estar juntos. Nos acompañó durante la grabación Pilar, la propietaria de
Anatma, que arrastrando su maltrecha pierna había llegado tarde y no encontró
un solo asiento libre en la sala. Allí, en la cabina de grabación, con cierta
dosis de intimidad, los tres nos emocionamos con Paula Carrillo, la hija de Emilio, que
condujo el acto con Amor y sencillez y no pudo evitar que le temblara su voz al
hablar de su padre, con Concha Redondo, ese ser tan maravilloso que la
providencia ha puesto en nuestro camino, que nos ayudó a conocer lo que somos con
un sentido padrenuestro, con José Luis González, de brillante dicción y mejor prosa y verso
y cómo no de Emilio, que a pesar de tantas y tantas charlas siempre sorprende
por su capacidad de comunicación y claridad al trasladar lo que siente, que no
es otra cosa que AMOR.
Después tuve el honor
de compartir una alegre velada con Charo, José María, mi querida Julia, Concha,
la familia de Emilio al completo y algunos amigos más, entre ellos a Javier
León y su compañera Laura, editores del libro. Nada es casual y desde luego no
lo es que un libro como Dios sea producido por una editorial como Nous.
Precisamente quiero
incluir, antes de facilitar los enlaces para ver el video del acto de
presentación o descargarse el audio, la hermosa semblanza que Javier ha hecho
de Emilio en su blog “Creando Utopías”. http://creandoutopias.net/
“Una de las cosas que más me gustan del oficio
de editor es la de conocer y reconocer a almas grandes, bellas, hermosas, que
irradian una luz especial, acorde con ese amor indispensable que traen no se
sabe bien de donde. Llevamos ya
algo más de tres semanas siguiendo la estela de Emilio Carrillo, un hombre
sabio que roza la santidad por eso de hacer lo que la madre Teresa de Calcuta
decía que teníamos que hacer: no hacer nada. O lo que es lo mismo, hacer sólo
aquello que nace de nuestro corazón y convertirlo en don y talento para luego
hacer lo que realmente se hace con los dones y talentos: compartirlos.
Eso hace Emilio,
dejando atrás su carrera política y docente para compartir su don de
introspección y comunicación, de buceo por las entrañas del ser y expresión
desde su mismo centro con aquellos que desde el silencio siguen sus pistas. Sin
máscaras, sin engaños, con la inocencia de ese niño que demuestra que la pureza
siempre llega de la simplicidad y la sencillez.
Así es Emilio, dócil,
humilde, con ese estilo suyo tan propio, sin aparentar nada, sin querer nada,
sin pedir o demandar nada, solo dando, dando, dando una y otra vez en forma de
gestos, de guiños, de abrazos, de generosidad. Tal es así, que hasta a nosotros
nos compra libros que luego regala, cuando no tendría necesidad de hacerlo.
Pero su consciencia va más allá, y sabe que todo está bien cuando todos estamos
bien, por eso él se paga sus viajes y sus hoteles, no pide nada por compartir
esas horas inquietantes a su lado, y siempre, siempre, siempre, tiene un abrazo
para todos, sin importarle el tiempo o la posibilidad de que pueda perder el
próximo tren. Y no sólo eso, dona los beneficios de autor a una fundación
sevillana y nos deja acompañarle, sin pedirnos nada a cambio, para que nosotros
podamos impulsar con las ventas del libro el proyecto O Couso. Un estilo
diferente de hacer las cosas, o mejor dicho, un estilo acorde con el nuevo
paradigma desde la coherencia y la estricta observancia.
Sin duda, cuando nos
miramos nos reconocemos. Quién sabe de qué lejana reminiscencia, tal vez de esa
época en aquel monasterio budista, o de aquella otra próxima a Montsegur, o
aquella escocesa en la que compartíamos el interés por el misterio. Esas cosas
que se intuyen y que afloran con pistas y señales que aparecen una y otra vez
en todo reencuentro. De hecho, hasta la forma en que hemos tenido de editar el
libro nació de forma extraña. Él en su crisálida de silencio y yo en la mía
propia, caminando las sendas del Camino de Santiago, buceando en mi propia
crisálida tras más de cincuenta días, entre retiros vipassana y peregrinajes,
sin pisar la oficina.
Lo cierto es que
ahora parecemos escuderos siguiendo al hidalgo. Ayer en Barcelona alguien me
preguntaba: “¿pero qué hace aquí el editor vendiendo los libros?” Realmente no
encontraba respuesta adecuada cuando veía todo lo que interiormente estaba
ganando al bajar al barro y acompañar a Emilio por este periplo increíble.
Escucharle una y otra vez no tiene precio. Cuando estás frente a él y lo
contemplas desde la distancia puedes ver su punto de luz, su resplandor que
nace de su don y su vocación en acción. Y no se trata de ninguna ayuda en el
camino de nadie como a él le gusta repetir con insistencia, pero sí de una
luminaria, de una esperanza que nos inspira fuerza y confianza. Así que,
gracias Emilio por todo y sigamos cabalgando hacia Avalon, las nueve reinas
hadas nos esperan para completar el proyecto Artur y ser partícipes de su
Misterio.”