martes, 21 de febrero de 2012

Gente despierta. La pequeña abuela: Keisha Crowther.

Nuestra amiga Beatriz nos aporta este mensaje de la pequeña abuela Keisha Crowther, Madre espiritual de la Tribu de Muchos Colores, de madre Sioux, iniciada como Chamana a la edad de 30 años ha sido reconocida por el Concilio de Ancianos Indígenas como La Guardadora de la Sabiduría de los Indios Americanos del Norte y ha sido entrenada por los seres de luz desde una edad temprana, pasando largos periodos sola en el bosque contactando con los seres de cuatro patas y los seres alados. Tiene un mensaje precioso y esencial para los seres humanos en este momento crucial en nuestra evolución.


lunes, 20 de febrero de 2012

Entre el corazón del Sol y el corazón de la Madre Tierra.

Comenzamos la semana con una nueva meditación conducida por nuestra amiga Julia Jiménez.




Julia es  psicóloga. Investiga sobre la consciencia como miembro de la División de Investigación y formación DKG de la Fundación StarViewer Internacional.

Se ofrece a continuación el enlace a una entrevista a Julia Jiménez en la que nos habla de Ciencia y Consciencia  emitida en el programa "LAS CUATRO ESTACIONES" de RADIOPOLIS (98.04 FM) en julio de 2011 (a partir del minuto 7).


domingo, 19 de febrero de 2012

Zen.


El maestro zen Carlo Zendo Tetsugen Serra, abad de los monasterios Ensoji y Sanboji, realiza una visita a Andalucía para proponer un ciclo de actividades relativas a la práctica del zen.

En Sevilla estará el día 23 de febrero, a las 19,30 horas, en el Centro Cívico Las Sirenas (Alameda de Hércules, s/n).

A continución se ofrece una breve sinopsis sobre la práctica Zen:


La meditación que desarrollamos en el zen se denomina zazen. Tiene como característica fundamental una determinada postura, la cual nos prepara para entrar en ese estado de quietud necesaria para desarrollar nuestra práctica.


Toda nuestra practica esta enfocada en vivir en el aquí y ahora, y para ello acostumbrar a la mente a desarrollarse en un espacio tan pequeño que le imposibilita moverse del instante presente.

Muchas personas creen que el aquí y ahora, es estar en tu tarea primordial presente con la mente, pero no es así. El aquí y ahora solo puede ser experimentable y no pensante pues en el momento que se piensa ya pertenece al pasado.

En Oriente se dice que llevamos una radio puesta, y que no sabemos desconectarla, pues bien en zazen intentamos apagar y encender esa radio cuando sea necesario.

En el momento presente la preocupación no existe, lo único que existe es la ocupación. El yo toma como referencia el pasado y el futuro para existir y acude a la memoria para recordarse esto hace que continuamente perdamos nuestro centro.

Zazen nos prepara para integrar nuestro yo en la experiencia vital, fundiéndose con dicha experiencia, donde observador y observado es lo mismo, esto nos hace bailar con la propia vida.

Dicha experiencia integradora nos hace formar parte de la misma conciencia, y cuando la conciencia llama a la conciencia se produce el milagro.

Este proceso de presencia interrumpida se logra por el cultivo de la atención plena, en el zen es fundamental posar la atención en lo que esta aconteciendo, esto es lo que hace que se produzca el acto de unicidad, por ello cuando nos dispersemos por algún motivo, tenemos que volver al objeto de la atención, tenemos que acostumbrar a nuestra mente a volver y volver.

En zazen observas y observas, te conviertes en el testigo que no se apega a nada, eres la conciencia donde todo se dibuja, ya sean pensamientos, emociones, visiones etc. Eres la pantalla donde la película se realiza.

Nuestra practica se sitúa en el camino y no en el fin, el samadhi o iluminación no es el objetivo principal, el objetivo es el eterno presente donde el espacio tiempo se para.

Hay una frase en zen que dice que hay que estar en el mundo sin ser del mundo.

Nuestra practica va en el mismo sentido que marca la nueva conciencia y esta enfocada al desarrollo consciencial y creo que esta ascensión planetaria que estamos viviendo va entrando en el proceso donde la presencia toma el protagonismo que antes tenia la mente. 
Y esta presencia se desarrolla en el Corazón. ¡Qué así sea!

 Os dejo con la película Zen, la vida de Dogen.


 

Ángeles del Círculo.





Ángeles del Círculo es la obra social del Círculo Sierpes de Sevilla. Sus integrantes son “BUSCADORES” que aportan económicamente cantidades entre 10 y 30 euros mensuales en una cuenta abierta para fines sociales y caritativos.

Con los fondos recibidos se intenta ayudar al mayor número de personas que se encuentren en situación de extrema necesidad y asociaciones de carácter humanitario que demanden ayuda urgente.

Mediante este comunicado pedimos a todos aquellos “BUSCADORES” que hasta el momento por desconocimiento no realizan ninguna aportación, consideren la posibilidad de hacerlo a partir de ahora, dadas las circunstancias cada vez más dramáticas de un gran número de personas.

Las aportaciones pueden realizarse a favor de Ángeles del Círculo en la C /C:

2106-0925-14-0102976041

Para cualquier información adicional pueden dirigirse a:

obrasocialangelesdelcirculo@gmail.com

El Equipo Gestor agradece de antemano todas las ayudas que puedan llegar gracias a este comunicado.

UN ABRAZO DE PAZ Y AMOR “Ángeles del Círculo”

jueves, 16 de febrero de 2012

Los Peluches de Dios.



El  jueves 1 de marzo, a las 19 horas, el escritor e investigador  Fran Ortega disertará en el salón de actos de las instalaciones del Círculo Mercantil de la calle Sierpes de Sevilla sobre su libro “Los peluches de Dios, el renacer de la Conciencia Crística”. La presentación correrá a cargo de Belén Montes y Julián Carrasco, integrantes de la Asociación Cultural Hinneni.

 
Fran Ortega nació en 1965 en Madrid, donde en la actualidad vive con su pareja y con dos de sus tres hijos.

Aunque su profesión habitual ha sido siempre en el mundo de la aeronáutica, tiene una una copiosa y profunda formación en terapias alternativas y energéticas.etc.

Viajero empedernido, ha recorrido el mundo de un extremo a otro, visitando cerca de medio centenar de países, desde Indonesia donde llevó a cabo labores de voluntariado tras el Tsunami, hasta el Perú, su lugar favorito para reencontrarse con la Madre Tierra.

Su incansable curiosidad le llevó, además, a introducirse en el mundo artístico formándose en dibujo, interpretación, técnicas clown, realización de cine, especializándose en guión.

Por otro lado, el afán por explorar la realidad del Ser le empujó a adentrarse en mundos sutiles y en la percepción de realidades paralelas.

Esa experiencia es ahora compartida con la esperanza de ser detonante de otras en personas comprometidas con recordar quienes son y de donde vienen.


PortadaEn los Peluches de Dios, Fran Ortega nos propone  hablar como viejos amigos de Universos fractales y multidimensionales. De mundos paralelos donde cada decisión nos lleva a generar otros “yo” para explorar todas las opciones existentes. De cómo nuestro “Yo Superior” no quiere perderse ninguna de las experiencias posibles y se entrega a la vivencia infinita y continua. Del Cristo que habita en cada uno de esos planos paralelos, aguardando para ayudarnos en el proceso de la Ascensión individual y planetaria. En sus páginas se indaga sobre el verdadero sentido de su prometida vuelta, de cómo ese retorno se está dando ya de manera energética, propiciando el despertar del Cristo Interior que se halla en el centro de nuestros corazones. Se habla también del Anticristo y su imprescindible presencia en el Cosmos de la Dualidad, lo cual nos adentrará en la falacia de la culpa sentida por todos y por tanto tiempo. Comprenderemos el verdadero significado de la Inocencia de Ser Hijos de la Creación. Conversaremos de responsabilidad, miedo, hacerse cargo, perdón, expiación, redención, ascensión… pero lo más importante de todo, nos ayudaremos mutuamente a recordar quienes somos.

Para abrir boca os dejo con una entrevista a Fran Ortega en el programa de Radio Nacional Espacio en Blanco, emitido el 15 de octubre de 2011 y el video de la presentación de su libro en el Centro Naturae Mater de Móstoles (Madrid), el 29 de septiembre del mismo año.

Si estás por Sevilla el  próximo 1 de marzo, no faltes a la cita.





También es autor de los libros  “A la sombra del olivo” y “Judas”.

miércoles, 15 de febrero de 2012

Rebirthing.



Rebirthing o Renacimiento es una práctica y un método científico, creado por    Leonard Orr (Walton, Nueva York 1938), que tiene por objeto  la realización personal, espiritual y la mejoría de la salud.




Para aproximarnos a esta práctica, se reproduce a continuación una entrevista a Leonard Orr que se recoge en el   Libro "RESPIRACIÓN Y ESPÍRITU: Respiración Conciente como Técnica de Sanación" de GUNNEL MINETT.


 
GUNNEL: ¿De dónde tomaste la idea original para el Rebirthing? ¿Cómo comenzó?

LEONARD: Las ideas sobre Rebirthing llegaron como resultado de mi evolución personal. Mi primera experiencia de Rebirthing ocurrió en 1962. Estaba tomando un baño y sentí que no podía salir de la bañera. No tenía fuerza su­ficiente para salir del agua. Por supuesto que  años después comencé a entender lo que había ocurrido. Entre 1962 y 1968 viví muchas «experiencias de bañera» como esa. En 1968, mientras estaba dentro de la bañera, co­mencé a tener recuerdos vívidos del momento de mi naci­miento. Por supuesto, entre 1965 y 1967 fui aclarando mi «impulso de muerte». Esto me proporcionó un lugar totalmente a salvo en mi mente, y me sentí seguro en el universo físico. Tal seguridad me permitió recordar conscientemente mi nacimiento, en varias oportunidades.

La energía inmortal siempre fue la base de la energía de Rebirthing. No es ningún secreto el hecho de que los renacedores (rebirthers) que en verdad han aclarado su impulso de muerte y el trauma de su nacimiento, brindan a sus consultantes un beneficio totalmente diferente en comparación al que ofrecen aquellos renacedores que sólo son técnicos de la respiración. En cierto sentido, los guías más expertos en ejercicios respiratorios no tienen la mis­ma profundidad para intuir, si no han aclarado su ciclo nacimiento-muerte, o por lo menos una parte significati­va de él. Pero probablemente, desenvolver el propio «caso», para llegar a ser una expresión pura del espíritu, puede consumir 50 ó 100 años.

El siguiente paso fue ofrecer un seminario en 1974, donde describí mis experiencias acerca del recuerdo del momento del nacimiento. Los que estaban presentes dijeron que ellos también querían pasar por experiencias de ese tipo. Les sugerí que se metieran en la bañera y se quedaran allí hasta que sintieran que debían salir. O que se quedaran durante por lo menos media hora, o más de una hora. En la mente existe una barrera psicológica -una barrera natural- que nos impide llegar demasiado lejos dentro de nosotros mismos. Cuando las personas se relajan y atraviesan esa barrera, llegan a una compren­sión fantástica de sí mismos. Los del seminario vivieron experiencias dramáticas y poderosas; llegaron a pedirme que estuviera presente cuando esto ocurría. De allí pro­viene la idea de un rebirther. Después de observar a una o dos personas, se me ocurrió la idea de usar un snorkel y una pinza para la nariz, en una bañera con agua caliente, que fuera bastante grande para que otras dos personas pudieran estar en el agua al mismo tiempo.

Así es como realmente comenzó el Rebirthing. Mien­tras conducía varios cientos de experiencias de Rebirthirig, me di cuenta de que las personas pasaban por una trans­formación del mecanismo de respiración; a esto lo llamé «curar la respiración». Me pregunté si seria posible guiar a las personas hasta que llegaran al ritmo respiratorio que yo veía aparecer espontáneamente durante las experien­cias. Hice algunos intentos, y encontré que sí era posible.

 
GUNNEL: ¿Cuáles son las mejores condiciones para una sesión de Rebirthing? ¿Se necesita un equipo especial o se puede hacer en cualquier parte y con cualquier persona?

LEONARD: Las mejores condiciones consisten en un espacio pri­vado y a solas con un guía. En algunos casos, es una buena idea integrar equipos de tres: un rebirther, un asistente y alguien que respira. No debe haber demasiado rui­do, para que el rebirther pueda escuchar el ritmo respira­torio de la persona y guiarla durante una hora o dos, o el tiempo que le lleve completar el ciclo de la energía. Rebirthing se realiza acostado, para que la persona esté completamente relajada y pueda dedicarse al ritmo respi­ratorio. Una sesión es un ciclo completo de la energía. El tiempo que lleve la sesión está determinado por la energía misma. La persona va hacia dentro de sí misma. La ener­gía se mueve tanto en el cuerpo como en la mente. Las concentraciones de energía negativa se van disolviendo, y esto responde tanto a un fundamento emocional como a un fundamento fisiológico.

Las sensaciones físicas que experimentan pueden va­riar mucho, y lo mismo ocurre con las experiencias men­tales y espirituales. Al comienzo de la práctica, los ciclos de energía son más físicos. Pero generalizar es difícil, ya que, en apariencia, las experiencias interiores de las per­sonas pueden ser muy diferentes. Pero si se observan ob­jetivamente desde el exterior, hay mayor acción fisiológica en las primeras cinco o seis sesiones, aunque interior­mente puede ocurrir lo opuesto. En ocasiones, experimen­tan sensaciones fisiológicas que despiertan miedos y gran preocupación en su mente racional; así, casi no pueden observar los fenómenos fisiológicos por los que van atra­vesando.

Usualmente, me «renazco» a mí mismo dos veces por día, en agua, en mi bañera. Esto requiere entre media hora y una hora, a veces más; lo hago dos veces por día, para meditar y respirar. Siento que, al participar en el mundo, la energía negativa se concentra especialmente en mi plexo solar. En estos baños, se disuelven muchas capas de energía. Puede ocurrir que sienta concentracio­nes de energía negativa alrededor de mi cabeza, en mi garganta, en mis tobillos o en otras partes de mi cuerpo. Después de meditar en la bañera durante media hora, o quizás más, siento que puedo dejarme ir y que mi cuerpo está relajado. Cuando salgo del baño siento que mi cuer­po está limpio y claro. Siento que mi cuerpo energético está limpio y equilibrado, y que me brinda una experien­cia de éxtasis y paz. Hasta que voy a un negocio o a algún otro lado y comienzo a recolectar energía otra vez. De modo que si me puedo mantener alejado de otras personas, mi cuerpo de energía está limpio durante todo el día, excepto en lo que se refiere al ciclo evolutivo natural que está ocu­rriendo. A lo largo del día, nuestra energía cambia, con independencia de lo que absorbemos. Me baño diariamente dos veces, para restablecer mi equilibrio.

El ciclo de energía es en realidad la base de Rebirthing. El principal objetivo es aprender cómo respirar tanto ener­gía como aire. El segundo objetivo es aprender a respirar en el agua, o a limpiar y equilibrar a diario el cuerpo ener­gético, con agua y con aire. Cuando las personas han aprendido a hacerlo, ya tienen un instrumento práctico muy potente que pueden usar para hacer que sus vidas cotidianas estén plenas de éxtasis.


GUNNEL: ¿Es cierto que hacer Rebirthing a solas, o hacer Rebirthing, no es para nada seguro? ¿Puede ser peligro­so?

LEONARD: En lo que se refiere a la respiración, Rebirthing siem­pre es seguro. La respiración es totalmente segura. La mente no es segura, y todo el tema de la seguridad nos lleva a la idea de la inmortalidad física. Mientras una per­sona crea que la muerte, la muerte física, puede ocurrirle sin el control de ella, que la muerte física es inevitable y está más allá de su control, jamás estará a salvo, haga lo que hiciere. Cuando uno se libera de esa idea y se siente tan seguro en el universo como dentro de su propia mente y en la presencia de Dios, nada hay que no sea seguro. Todo es seguro. De modo que la inseguridad es creada por la mente. Cuando una persona comienza a entender su propia mente, ya no tiene que preocuparse por ella. Rebirthing es tan seguro como lo sea la mente de una per­sona. Esté o no respirando, una persona tiene que vivir en su propia mente. Si una persona no se siente segura, es­tará tan insegura cuando hace Rebirthing como cuando no lo hace.


GUNNEL: ¿Cuál es la parte más importante de la respiración en Rebirthing? ¿El ritmo? ¿El tiempo que dura la respiración? ¿Qué es?

LEONARD: La parte más importante es fundir la inhalación con la exhalación. Cuando la inhalación queda fusionada con la exhalación uno experimenta, en el nivel fisiológico, la unidad del ser. En una respiración estás experimentado la fusión del espíritu en la materia. Yo lo llamo la expe­riencia biológica de Dios.


GUNNEL: ¿Es esto algo que Ud. desarrolló o está basado en an­tiguas ideas orientales?

LEONARD: No, yo lo aprendí en las primeras sesiones de Rebirthing, observando cómo se modificaba el mecanismo respiratorio de las personas. Lo llamé «aprender a respirar a partir de la respiración misma». En cierto punto del proceso, aprender a respirar a partir de la respiración misma, para algunas personas es una realización inter­na. Al comienzo, esta no fue una experiencia inducida. Fue algo espontáneo. Cuando vi lo que ocurría, me pre­gunté a mí mismo si podría inducir esta experiencia, guian­do el ritmo respiratorio de la persona hacia el ritmo que vi emerger espontáneamente. Pero cuando guié el ritmo res­piratorio de una persona hacia la experiencia de aprender de la respiración misma, fundiendo la respiración interna con la respiración externa, la persona no llegó a percibir lo que ocurría. Es decir, no podía aprender ese ritmo res­piratorio en dos o tres sesiones. Sin embargo, un alto por­centaje de personas sí aprendió ese ritmo respiratorio. Aprendieron cuál es la conexión entre la respiración in­terna y la externa, con frecuencia en un período de entre cinco a quince sesiones. Allí hay un punto en el que una persona comprende que ella es tanto la energía de su res­piración como el aire. Cuando esto se integra en la mente y en el alma individual, ya han aprendido a respirar. Esto es lo que queremos decir con respiración consciente. Es hacer conscientemente la conexión del ritmo respiratorio. Fusionar la inhalación y la exhalación: esa es la técnica, pero el poder del espíritu de la técnica es conocer, de for­ma intuitiva, que estás respirando tanto energía como aire. 


GUNNEL: En el pranayama se pone énfasis en la pausa entre la inhalación y la exhalación. ¿En Rebirthing sucede lo con­trario?

LEONARD: La respiración conectada es la forma natural de res­pirar el espíritu dentro del cuerpo. Así es como respiran los recién nacidos. Las personas respiran así cuando duer men profundamente. Esto no significa que hacer ejerci­cios diferentes no tenga valor. Yo, por ejemplo, creo en la respiración nasal alterna. Esto es, inhalar a través de una narina, y exhalar a través de la otra, de manera alterna­da. Este ejercicio en especial limpia el pasaje que va desde las narinas hasta el sistema nervioso. Cuando esos pasa­jes están limpios, la energía se integra en el cuerpo, de un modo tal que cura todos los órganos y los mantiene en buen estado.


GUNNEL: ¿Cómo guía a las personas durante la sesión? ¿Usa solamente su intuición o emplea también la técnica mis­ma?

LEONARD: Las personas están construidas de forma tal que, si uno utiliza sólo la técnica de fundir la inhalación y la ex­halación, la experiencia se irá dando de forma más espon tánea. La habilidad de un buen rebirther está determina­da por la intuición que tiene para poder ver, oír y sentir la energía que se va fundiendo en el aire. No es posible en­trenar a las personas para que intuyan. Sólo se les puede proveer un ambiente en el cual desarrollar su intuición. Es posible observar que una persona desarrolla la habili­dad para intuir, pero no hay modo de forzarla a hacerlo.

GUNNEL: ¿Existe alguna diferencia entre usar agua fría, agua caliente o hacer una sesión seca? ¿En qué consiste? 

LEONARD: Hay una gran diferencia. El agua tibia estimula los recuerdos intrauterinos y experiencias psicoanalíticas y psicofisiológicas profundas. Induce un estado de relaja­ción muy profunda. Todo el cuerpo fisico se formó en un medio de agua tibia, en el útero. De esta forma, nuestra estructura emocional básica se formó en el agua caliente. El nacimiento es la primera experiencia de frío. Rebirthing en agua fría tiene la tendencia a disolver nuestro trauma respecto de la temperatura, o de otras experiencias displacenteras, cuando salimos del mundo cálido y entra­mos en el mundo frío. Rebirthing en agua fría hace Rolfing con la energía del cuerpo. (Rolfing es un estilo de masaje de los tejidos profundos, desarrollado por Ida Rolf y usado para evocar emociones, mediante el contacto fisico). Rolfing es una manera de estimular y contactar el dolor que se almacenó en el organismo psicofisiológico. Los más pro­fundos niveles de dolor del organismo humano pueden ser estimulados y trabajados mediante Rebirthíng en agua fría. La técnica básica de Rebirthing en agua fría es entrar en ella centímetro a centímetro, e integrar las sensacio­nes a medida que se va avanzando. Se puede demorar entre media hora y una hora, para entrar en el agua. El agua puede estar a cualquier temperatura, mientras se trate de entrar en agua fría, y no en hielo. Pero la tempe­ratura del aire no debe estar por debajo del nivel de con­gelación, porque uno puede morir congelado. Cuanto más confortable sea la temperatura del aire, mucho mejor. Pre­fiero hacer esto a mediodía, cuando hay mucho sol y cielo azul. La brillante luz del sol permite integrar el dolor y la incomodidad y estimula una rápida liberación de los blo­queos. Pero hice Rebirthing en agua fría en medio de tor­mentas de lluvia, cuando los que asistían tenían que usar paraguas.


GUNNEL: ¿Por que es tan efectivo el Rebirthing ? ¿En qué forma afecta al cuerpo?

LEONARD: El significado último de esta pregunta sería ¿por qué respiran los seres humanos? Los humanos respiran para inhalar oxígeno de manera fisiológica y para liberar mate­ria residual. En los hechos, la respiración es el máximo sistema excretor que tiene el cuerpo. El que le sigue, en orden de importancia, es el sudor; orinar y defecar vienen al final en la lista de prioridades para la liberación de los residuos del cuerpo. Cuando se está respirando con el ritmo conectado, se produce en el cuerpo un efluvio de energía que lo nutre y lo purifica de manera efectiva, en un nivel óptimo.



lunes, 13 de febrero de 2012

Gente despierta.

Mi amiga Marisol me envia este artículo de Ángeles Caso, periodista y escritora, publicado en La Vanguardia. Ángeles también ha despertado... 

 



"Será porque tres de mis más queridos amigos se han enfrentado inesperadamente estas Navidades a enfermedades gravísimas. O porque, por suerte para mí, mi compañero es un hombre que no posee nadamaterial pero tiene el corazón y la cabeza más sanos que he conocido y cada día aprendo de él algo valioso. O tal vez porque, a estas alturas de mi existencia, he vivido ya las suficientes horas buenas y horas malas como para empezar a colocar las cosas en su sitio. Será, quizá, porque algún bendito ángel de la sabiduría ha pasado por aquí cerca y ha dejado llegar una bocanada de su aliento hasta mí. El caso es que tengo la sensación –al menos la sensación– de que empiezo a entender un poco de qué va esto llamado vida.


Casi nada de lo que creemos que es importante me lo parece. Ni el éxito, ni el poder, ni el dinero, más allá de lo imprescindible para vivir con dignidad. Paso de las coronas de laureles y de los halagos sucios. Igual que paso del fango de la envidia, de la maledicencia y el juicio ajeno. Aparto a los quejumbrosos y malhumorados, a los egoístas y ambiciosos que aspiran a reposar en tumbas llenas de honores y cuentas bancarias, sobre las que nadie derramará una sola lágrima en la que quepa una partícula minúscula de pena verdadera. Detesto los coches de lujo que ensucian el mundo,  las joyas fabricadas sobre las penalidades de hombres esclavos que padecen en las minas de esmeraldas y de oro a cambio de un pedazo de pan.


Rechazo el cinismo de una sociedad que sólo piensa en su propio bienestar y se desentiende del malestar de los otros, a base del cual construye su derroche. Y a los malditos indiferentes que nunca se meten en líos. Señalo con el dedo a los hipócritas que depositan una moneda en las huchas de las misiones pero no comparten lamesa con un inmigrante. A los que te aplauden cuando eres reina y te abandonan cuando te salen pústulas. A los que creen que sólo es importante tener y exhibir en lugar de sentir, pensar y ser.


Y ahora, ahora, en este momento de mi vida, no quiero casi nada. Tan sólo la ternura de mi amor y la gloriosa compañía de mis amigos. Unas cuantas carcajadas y unas palabras de cariño antes de irme a la cama. El recuerdo dulce de mis muertos. Un par de árboles al otro lado de los cristales y un pedazo de cielo al que se asomen la luz y la noche. El mejor verso del mundo y la más hermosa de las músicas. Por lo demás, podría comer patatas cocidas y dormir en el suelo mientras mi conciencia esté tranquila.


También quiero, eso sí, mantener la libertad y el espíritu crítico por los que pago con gusto todo el precio que haya que pagar. Quiero toda la serenidad para sobrellevar el dolor y toda la alegría para disfrutar de lo bueno. Un instante de belleza a diario. Echar desesperadamente de menos a los que tengan que irse porque tuve la suerte de haberlos tenido a mi lado. No estar jamás de vuelta de nada. Seguir llorando cada vez que algo lo merezca, pero no quejarme de ninguna tontería. No convertirme nunca, nunca, en una mujer amargada, pase lo que pase. Y que el día en que me toque esfumarme, un puñadito de personas piensen que valió la pena que yo anduviera un rato por aquí. Sólo quiero eso. Casi nada. O todo."